Mine •50•

SICHENG

ㅡLuego de esto, quizás considere poner un ascensor cerca de la escalera, por las tantas veces que Yuta ha aparecido magullado frente a mi casa.

ㅡEntonces, ¿no es la primera vez que lo golpean?ㅡpregunto mientras avanzamos a paso lento por las escaleras.

ㅡHmm, digamos que no por las mismas personas...

Taeil dio varias palmaditas cariñosas a la espalda de Yuta, quien le maldijo en voz baja, quejándose por el dolor.

ㅡ¿Para qué has venido?ㅡpregunta Yuta, con algo de recelo en su voz.

ㅡB-bueno, vine a buscar a Taeil..., pero luego tú, yo...

ㅡ¿Para qué?ㅡpregunta nuevamente en voz baja, como si no hubiera oído mis titubeos

ㅡQuería verte, ¿lo entiendes?

ㅡNo lo creo, no puedo entenderte. Creía que habías dicho que no me querías cercaㅡreplica y desvía su mirada de mí hacia un lugar vacío.

ㅡNo lo dije enserio...y me disculpo por eso, yo solo, no tengo excusas por lo que dije, ¿Puedes disculparme?

ㅡNo lo sé, Sicheng. Contigo todo es tan indeciso...

ㅡUgh, vamos Yuta no te pongas difícil que no eres el más indicado. Bien sabes que quieres hacerloㅡinterviene Taeil.

ㅡ¡Te pedí que cierres el pico entrometido!

ㅡPero, ¿Aún me quieres?ㅡlas palabras salen rápidamente de mi boca. No tenía pensado decirlas.

Yuta se vuelve hacia mí rápidamente.

ㅡ¿Qué? ㅡpregunta pasmado.

ㅡ¿Qué si me quieres?ㅡrepito, cometiendo el mismo error.

Yuta desvía sus ojos en otra dirección, evitando mi mirada.

ㅡEs increíble que me preguntes eso, creía que eso ya estaba muy claro.

ㅡY ¿Qué importa si lo hago? Solo dímelo y ya está.

ㅡ¡No puedes preguntarme eso!ㅡgruñe.

ㅡBienㅡindiqué. Es todo lo que consigo decir.

ㅡ¿Por qué actúas de esta manera?

ㅡNo importa.

Taeil, que está detrás de nosotros, se da una palmada en el rostro.

ㅡ¡Dime que es lo que sucede contigo!ㅡme ordenaㅡ¿Por qué sigues dudando de todo lo que hago por ti?ㅡel cuerpo de Yuta se tensa y aprieta los puños.

La situación me resultaba terriblemente dura.

ㅡNo puedo decirlo.

ㅡ¿Por qué no puedes?ㅡreprocha.

ㅡSupongo que tengo miedo.

ㅡ¿Miedo de qué?

Yuta se acerca y me coge de los hombros para darme confianza.

ㅡYo solo...cuando te vi llegar junto a él, pensé que... ㅡhablé casi como en un susurro.

Taeil suspiró y debió su mirada hacia una ventana, recostándose sobre la barandilla.

ㅡTuve miedo de perderteㅡconfieso finalmente.

Sus rasgos se suavizan. Yuta hizo una pausa y me miro directamente a los ojos.

ㅡVayamos adentroㅡdice subiendo el último escalón, y abriendo la puerta de una de las habitaciones.